viernes, 22 de junio de 2012

El dinero no es todo, pero... ¿Quién quiere todo?

Charlotte Caniggia peinando a su perrita "Pocha"
El otro día de casualidad puse Showmatch y dije "No, mirá esa rubia". Dejo dos segundos, pero cuando empezó a hablar ella y la madre se me cayó una ídola. La escuchaba atentamente ante las burlas del jurado, de los reidores y del pelotudo de Marcelo Tinelli, y pensaba: "Esta piba es re triste". Y recordé la frase: "Hay gente tan pobre que lo único que tienen es dinero".

Pobre esta chica no debe saber lo que es el amor. A Charlotte sólo le gustan los chicos que "tienen dinero y una Ferrari". Con lo jodido que está encontrar una persona buena si a eso le sumamos que tenga guita y una Ferrari, estamos al horno. Esta chica debería pedir que su novio sea inteligente, bueno, cariñoso, humilde, sin embargo pone como virtud tener una Ferrari, ¿Yo que viajo en el 59 soy menos que alguien que tiene un Bentley?, para la hija del Pájaro Caniggia, sí, soy un negro feo.

En Twitter llovian los insultos y las criticas para ella: "Es una rubia hueca", "cheta de mierda", etcétera. La mayoría de los comentarios desde la ignorancia, la envidia y la discriminación. Muchos se enojaron porque no sabía dónde quedaba Argentina, sin embargo montón de esos INTELIGENTES no tienen ni puta idea dónde queda Marbella, o sea, quién critica a quién? Quién sos para decirle hueca? Einstein? No, sos una boluda igual que ella jaja.

Más que repudiable y fácil para hacer burla, me parece triste. Esa piba me da lástima...

"¿Para cuándo la novia?"

"La mujer que quieres está adentro"
Es cotidiano escuchar de una tía o una abuela, la frase "¿Para cuándo la novia?". Frase cansadora y hartante, con la que uno clava una cara de orto terrible para resumir una infinidad de insultos.

Anoche me preguntaba: "¿Por qué carajo estoy solo?". Lo primero que se me vino a la cabeza fue la joda. Uno está solo, porque basicamente porque le gusta la noche, los excesos, las mujeres, la LIBERTAD. Sentirse libre, no importarte nada. No darle explicaciones a nadie: "¿Qué estoy saliendo mucho con mis amigos?- Pero andate a cagar! Tomátela! Me voy a Cocodrilo con los pibes! Cuando te vayas, cerrá la puerta con llave y dejale la comida al boby".

Estoy solo porque no quiero recibir retos de nadie. "Mariano vos siempre hacés esto...", "Tenés que...", "Me tenés cansada", "Siempre lo mismo con vos". No me reta mi madre, me va a retar otra mujer. Estoy medio viejo para que me reten. "Mariano al rincón". Esta que voy a ir al rincón jaja. Siempre aclaro, una cosa es el diálogo, y otra cosa es que TE ROMPAN LAS PELOTAS. Estoy de acuerdo con dialogar, charlar, debatir, discutir, pero que me rompan los huevos... No.

Suele estar la persona que te dice: "Estás solo, porque no te bancarías ser fiel, y menos en Buenos Aires". Qué carajo sabés vos, cornudo. Si me propongo a estar con alguien estoy con esa persona, las demás porteñas me importan muy poco. Es verdad que Buenos Aires ayuda a ser infiel, suelo decir que si fuera "mala persona" y estaría de novio podría tener otras tres relaciones que mi pareja ni en pedo se daría cuenta. Es muy fácil mentir acá, otra de las razones por las que estoy solo.

Es muy fácil ser infiel, uno puede tener una novia en Palermo, tener una amante en Quilmes, otra en Ituzaingó, otra en San Isidro, y nadie se va a enterar nada. Sólo basta con saber utilizar bien el Facebook o no utilizarlo, y listo. Y ni hablar de ir a prostíbulos, porque con los privados hay total confidencialidad. Es por eso que la porteña en general es re desconfiada, siempre piensa que hay algo más y nunca termina de creerte. Y si no me crees, no voy a estar con vos.

Luego estoy solo por el hecho que de tanto fracaso, tanta decepción, uno empieza a poner filtros, a ponerse exquisitos. Cuando le digo a una amiga que busco una chica sincera, carismática, divertida, fiel y compañera, me dice: "Ah, bue! No pedís nada!". A lo que me pregunto ¿Es TANTO pedir por una chica así? Lamentablemente parece que sí. Para que me juegue por alguien o evalue jugarme por alguien, esa persona debe valer la pena de verdad, debe ser un 10, sino no me la juego. Este es mi cuarto año acá, y sólo una chica pudo clavarme la duda de si valía la pena dejar el parche, imaginate que en estos casi cuatro años, conocí infinidad de mujeres y sólo una, pudo hacer eso. y o sea, significa que conseguir una chica con todos esos requisitos es una tarea que se me hizo imposible.

Y por último, algunos dirán que estoy solo porque no quiero sufrir. O sea, me re chupa un huevo sufrir, ya sufrí, sufrir de nuevo no me jode, ya estoy acostumbrado. Sí me molestaría hacer sufrir a la otra persona, pero eso es otra cosa. "No puedo, no quiero sufrir", me parece una re pelotudes, si creés que esa chica vale la pena, jugátela, y si sufrís y bueno, perdiste, otra vez será, pero sabrás que te la jugaste. Creo que ahora debería jugarmela, no me gustaría que en un tiempo esté con una mina corriente, berreta y que no quiera, y en eso me pregunte: "Qué hubiera pasado si me la hubiera jugado por esa chica que conocí en...?".

miércoles, 20 de junio de 2012

"So I take pleasure in details"

"You and me and five bucks"
Muchas veces nos preguntamos si somos felices, o qué cosas nos hacen felices. Muchos dirán que los hace feliz tener un buen auto, una buena casa, ser millonarios. Pero para mí la felicidad está en otro lado. Esos pequeños momentos que no nos damos cuenta, pero sirven para hacernos felices. Trato de disfrutar de esos pequeños retazos de vida...

Gritar un gol con un amigo y abrazarlo. Es ese segundo que se puede decir que sos feliz. El momento en el que de la risa te duele el estómago. Abrazar a mi mamá. Encontrar una moneda en el piso. Un fernet. Que me rete mi mamá al grito de "Mariano Martín!", que mi perro me venga a saludar. Esos 5 minutitos extras que me tomo luego de despertarme. Ir caminando de la mano. Mirarla a los ojos y no prestar atención a lo que está diciendo. El café con leche de mi mamá. Tomar mates en familia. Saludar a alguien y sentir su mejilla fría. Que la nieve caiga en mis pestañas. Ver a un nene sonreír. El segundo antes de comer un pizza casera. Terminar de orinar luego estar aguantando mucho tiempo. El cielo cuando se hace rosa. Un beso sin aviso. Ir caminando en la calle y que un conocido te toque bocina, o te grite "Eh Mariano!". Un "te quiero". Una caricia. Que me despeine. Caerme de culo, y tentarme. Respirar aire puro. Ese momento en el que el vendedor me dice que tengo un descuento. Una charla de padre a hijo. Que me metan la mano helada en la espalda. Un buen asado. Que alguien se duerma en mi pecho. Quedarme colgado mirando una foto y recordar lindas anécdotas. Ese momento en el que pensás en ella cuando viajás en colectivo y te pasás de parada. Cantar en la ducha. Hacerla reír...

Los detalles son los que le dan sentido a la vida, esas pequeñas cosas, no una casa grande, un plasma, ganar el Loto, ganar un Grammy.

"There's no point to any of this. It's all just a... a random lottery of meaningless tragedy and a series of near escapes. So I take pleasure in the details. You know... a Quarter-Pounder with cheese, those are good, the sky about ten minutes before it starts to rain, the moment where your laughter become a cackle... and I, I sit back and I smoke my Camel Straights and I ride my own melt"

¿Yo?...¡Argentino! (Parte I)

Día de la bandera en Río Grande, Tierra del Fuego
El argentino podrá ser lo que sea, pero nunca pasa desapercibido. Podemos ser odiados y amados al mismo tiempo. Siempre se habla de nosotros, sea bien o sea mal. Pero, ¿Qué tiene el argentino que lo hace "especial? ¿Cómo es un argentino?

Los extranjeros suelen comentar que el argentino es soberbio, que se cree el mejor del mundo, sin embargo es el primero en criticar a un argentino.Para todo el mundo, Lionel Messi es el mejor futbolista, no obstante en nuestro país es un "español", un "pecho frío", o que "juega bien sólo en Barcelona". Decimos que Maradona es el mejor, pero cuando un extranjero lo alaba decimos que "es un drogadicto". Cuando afuera nos hablan del Che Guevara, para nosotros es un "zurdo de mierda". Cuando nos hablan de que somos honestos o simpáticos somos los primeros en alertar: "Cuidate, somos todos mentirosos, somos unos chamuyeros".

Ya por el ejemplo anterior notaremos que somos contradictorios. Tenemos un país en crisis, con varios problemas, pero todos eso los arreglamos tomando un café en un bar. Una mesa de café para el argentino es una convención del G-20, en una servilleta organizamos todo, la servilleta es el elemento que puede salvar a un argentino. "Mirá si yo fuera presidente hago esto", "Pfff, esto es re fácil". En esa mesa podemos armar el equipo para ganar el próximo Mundial, armar una estrategia para que ningún chico muera de hambre, encontrar la cura para el cáncer...

El argentino es desconfiado. Cuando le dan el vuelto siempre lo cuenta, cuando le dan un billete se fija si es falso, cuando recibe un gran favor sorpresivo dice "Mmm, por algo lo hace, este anda en algo raro". Sin embargo, toda esa desconfianza entra en contradicción. Para el argentino, todos son sus conocidos: "Maestro, cómo va? Me pasás la hora?", "Che máquina, tenés fuego?", "Capo, tenés un cigarrillo?", "Permiso, amigo".

Diremos que somos los mejores o que somos los peores, pero para nosotros somos únicos, y del resto de mundo no sabemos mucho y tampoco nos interesa saber. Para nosotros los españoles, vascos, catalanes...son todos gallegos. Los coreanos, taiwaneses, japoneses, filipinos...son todos chinos. Los polacos, ucranianos, chechenos...son todos rusos. Los egipcios, iraquíes, iraníes, palestinos, libios, hasta armenios...son todos turcos. Y los senegaleses, sudafricanos, marroquíes...son todos negros.

El argentino es feliz con muy poco. Lo pueden echar del trabajo, le pueden estar serruchando a la mujer, se le puede estar muriendo la madre, pero si su equipo gana no le importa nada. El argentino deja su humor en manos de 11 tipos que patean una pelota durante 90 minutos. Ese tiempo es el que determinará su ánimo durante el resto de la semana. "Por qué estás triste? - Perdimos contra los putos de Chaca, me quiero morir".

El argentino no es muy religioso, pero tiene de Dios a Maradona. Y en esa religiosidad y el fútbol, el argentino está lleno de creencias. El argentino cree en la mufa: "Perdimos por tu culpa, sos un piedra, no te invito más" o al revés "Vamos! Ganamos, todo porque viniste! Más vale que el próximo partido vengas". Cree en los amuletos: "Ganamos porque tengo la estampita de San Expedito".

Dicen que el argentino nunca cumple una promesa. Sin embargo, las promesas verdaderas sólo las hace por fútbol. "Si ganamos voy caminando hasta Luján", "Si ganamos el clásico me pelo", "Si zafamos de descenso te entrego la cola". Y el argentino lo hace y feliz de la vida.

Por último les dejo estas líneas contundentes que encontré:

"Los argentinos son italianos que hablan español.
 Pretenden sueldos norteamericanos y vivir como ingleses.
Dicen discursos franceses y votan como senegaleses.
Piensan como zurdos, y viven como burgueses.
Alaban el emprendimiento canadienses y tienen una organización boliviana.
Admiran el orden suizo, pero tienen un desorden tunecino.
LOS ARGENTINOS SON UN MISTERIO"